Señales

Aprendé a escuchar las voces que se pronuncian en las pequeñas cosas de la vida. Muchas son las señales que se expresan tras nuestros pasos en el día a día.
Desde el canto de los pájaros por la mañana. La melodía del río. El sonido del viento. La palabra del prójimo que pasó a nuestro lado. El papel que está abandonado en una vereda. La canción que suena desde esa casa o desde ese comercio por el cual pasaste. La pintada en la pared, y hasta la frase de una remera. De esta manera, vas a observar cómo todo habla, cómo todo se comunica con vos.

Nuestro mundo tiene la manía de la velocidad. Rapidez en las calles. Celeridad en el trabajo. Ligereza en las relaciones. Hasta en nuestras oraciones somos precipitados ¿Desde cuándo aprendimos a vivir con tanta prisa y comenzamos a perdernos las verdaderas maravillas del mundo?
Aquietá la acelerada acción de tu cotidianidad y sé más contemplativo. Mientras más pisás el acelerador, más oportunidades reales te perdés.

Apuntes sueltos en la soledad del hogar

* La distancia crea nostalgia. La nostalgia es presencia ausente de alguien querido. 

* Los grandes encuentros se alimentan de pequeños encuentros anteriores.

* Amigos verdaderos son aquellos que jamás nos traicionan o abandonan.

* Tené cerca a la gente que te quiera, que te ame, que brille con su Luz y que tu Luz no les sea incómoda. Tené cerca a pocos, pero verdaderos amigos; aunque sólo puedas contarlos con una mano y sobren dedos, aunque no estén físicamente porque su presencia va más allá de la materia.

* Nadie es insustituible. Pero todos somos útiles y necesarios.

* Lo más importante es amar siempre, con respeto y con lealtad.

* Saná y abrí tu corazón con claridad.

* Llorar durante mucho tiempo ha hecho que tenga los ojos más claros para contabilizar las estrellas y más profundos para las cosas de todos los días.

* Quién sintió la muerte de cerca, observa la vida bajo otras perspectivas, y quién escapa a un peligro, ama la existencia con una mayor intensidad.

* La palabra repetida cien veces tiene sabor a novedad eterna. 

* El amplio manto de la vida está tejido con el hilo de las oportunidades.  

* Convertite en un guerrero, en una guerrera, con espíritu de triunfo sobre el mal.

* Controlá el ego, liberá al espíritu y oí a tu Alma: ¡ahí están todas las respuestas!

* Abrite a escuchar con suma atención la palabra de tus Guías Espirituales y la de Dios.

* Agradecé lo que es, lo que fue y lo que será.

* Dejá que la gratitud te llene y fluya hacia los demás.

* Mantené la visión en aquellos que buscan tu consejo y ofreceles amorosa amabilidad.

* Que la conciencia sea el juez de cada uno de nosotros.

* Perdonate y avanzá de casilleros.

* Descubrí quién sos en verdad, conocé tu esencia y viví desde del propósito de tu alma.

¿Todavía existen Milagros?

Alguien te espera...

Que el amor te encuentre cuando menos lo esperes y que al re-conocerse desde el alma, sus rostros brillen de felicidad.
Que el corazón tome otro ritmo cuando el abrazo de los cuerpos se haga presente.
Que los besos empapen de dicha a la unión y que el amor nazca desde el interior del corazón.
Que las caricias sean un pincel sobre la obra de arte que representa la piel.
Que juntos logren un equipo invencible ante las adversidades y sean cada vez más fuertes.
Que la comunicación, el compromiso y la lealtad sean los estandartes principales.
Que la intimidad sea sagrada y elevada.
Que la evolución los abrace en cada paso que den, a través de la profundidad de sus conversaciones y acciones.

Todo esto y mucho más es lo que te deseo. Merecés lo mejor, nunca algo menos a lo descripto.
Alguien en el mundo está esperando por tu encuentro y esa energía se halla cada vez más cerca de lo que imaginás. Mientras tanto, seguí en plena conexión con tu amor propio y tu poder personal.
Cuando llegue esa persona, tenés que estar preparado. Te lo dice un eterno buscador de la unión verdadera. 

¡Fracasar es no intentarlo!

No dejes nunca de hacer lo que deseás por miedo al fracaso. Fracasar no es alcanzar la meta: ¡Fracasar es no intentarlo!
La mayor y única frustración está en no iniciar el recorrido. Hacé lo que te propongas y llegá hasta donde puedas, hermano y hermana.
Ese es tu triunfo: poner tu voluntad del empeño. Conseguirlo no es lo de menos. Lo que cuenta es la perseverancia, la determinación, la constancia y la convicción de saberte capaz para tomar el impulso hacia lo que anhelás.
Que nadie te diga: "No podés". Esa es su debilidad. No la tomes personal.

Cada día estoy más convencido de que la vida es camino, y no una meta.