La Ley de Atracción

La Ley de Atracción nos dice que todo lo que hay en nuestro entorno, material y emocional, es atraído por nosotros mismos a través de nuestra imaginación. Si mantenemos una meta en nuestro pensamiento, llegará la inspiración de cómo lograr el objetivo. Tengamos los mejores pensamientos al despertar, visualizemos nuestras metas, sintamos que lo logramos. Vamos a buscar lo positivo y así la ley de atracción nos manda más de lo que apreciamos. Cuando comenzamos a entenderla, nuestra vida empieza a cambiar.

El Universo nos muestra las posibilidades y nos trae la inspiración para que logremos nuestras metas. Por otra parte, la ley de atracción es libertad: nos da poder para elegir nuestro destino. "Yo puedo ser lo que decido Ser", es una de las frases emblemáticas de este tratado espiritual Nos da energía al pensamiento, y es la sustancia necesaria para la Ley de Crecimiento. Atraemos lo que tenemos en nuestros pensamientos. Lo que pensas, lo creas. Lo que sembras, cosechas. Cada pensamiento es una vibración y modifica cada átomo del cuerpo, cada célula. Todos sabemos lo que nos produce buenas vibraciones, alegría, recuerdos felices a nuestra mente: acariciar nuestra mascota, jugar con ese bebé que tanto amamos, traer a nuestra memoria imágenes de nuestras vacaciones junto al mar, recordar lo bien que la pasamos con ese ser que nos brinda felicidad y amor, entre otras cosas.

Nuestra salud depende de la ley de atracción en nuestro interior. Cada célula de nuestro cuerpo es inteligente y responderá a su dirección. Las células son todas creadoras y formarán el patrón exacto que les damos. Si seguimos la ley, reconociendo el poder de nuestro Ser, alejamos los miedos y cambiamos enfermedad por armonía y perfección. Cuando pensamos, hablamos o visualizamos amor, armonía, salud, vitalidad, energía y juventud creamos situaciones armoniosas con la perfección de nuestro Ser Interior.

3 comentarios:

valeria dijo...

Me encantó Mati, mantener ese pensamiento es algo muy agradable, aunque a veces ocurran cosas que nos desestabilicen nuestra armonía.
El poder de la mente es incalculable, pero la mente es como un martillo, sirve para construir y para destruir, a veces lamentablemente su poder de destruir es tan fuerte que muchas enfermedades somáticas derivan de problemas psicológicos.
Por eso es tan importante intentar mantener un autocontrol, para sembrar en vez de destruir, para crecer en vez de retroceder, para avanzar hacia nuestras metas, para confiar en nosotros mismos y luchar por conseguir aquello que estamos buscando.

justicia dijo...

muy bueno!!!!!!!...pasen y comenten:
justiciaporloschicosdecromanon.blogspot.com

Anhedonia dijo...

Matías! Gracias por pasar por mi nuevo espacio virtual. Por lo que podrás haber visto, soy nueva en esto y no entiendo mucho el mecanismo..
Muy interesante lo que subiste hoy. Somos lo que queremos ser y lo creamos. Creo que no todo es posible de cambiar, pero también es importante saber que lo escencial sí puede evolucionar. Citando a un groso "lo escencial es invisible a los ojos" Y no nos quedemos con sólo lo superfluo de la frase, aunque haya millones de cosas que no podemos percibir, desde el momento que las conocemos, tenemos el poder de modificarlas, aunque ignoremos su procedencia.

Que tus cosas anden bien.
Sin más..







Firme acá, firmando de la misma manera y en el mismo lugar.